Una nueva iniciativa en Nueva Gales del Sur (NSW) explorará el papel del cáñamo industrial en la transición hacia una economía circular neta cero, según el gobierno del estado australiano.
El Grupo de Trabajo de la Industria del Cáñamo tiene como objetivo establecer cadenas de valor sólidas, abordar las barreras legislativas y explorar la armonización de las regulaciones nacionales, según el Departamento de Industrias Primarias de Nueva Gales del Sur, que está facilitando el esfuerzo.
El grupo de trabajo convocará reuniones mensuales para delinear los objetivos a corto, mediano y largo plazo para la industria, siguiendo el marco legal descrito en la Ley de Cáñamo Industrial de Nueva Gales del Sur de 2008.
Reducir la burocracia
El nuevo organismo, que estará integrado por diez representantes de productores y asociaciones industriales, surgió de una mesa redonda gubernamental el año pasado que fue organizada por el miembro del Consejo Legislativo de Nueva Gales del Sur, Jeremy Buckingham, y a la que asistió Tara Moriarty, Ministra de Agricultura.
«Guiado por los resultados del grupo de trabajo, el Gobierno puede considerar qué trabajo se requiere para reducir la burocracia y proporcionar el entorno regulatorio para apoyar el crecimiento de la industria del cáñamo industrial y generar empleos en la región de Nueva Gales del Sur», dijo Moriarty.
Flores excluidas
La iniciativa excluye la producción de flores de cáñamo con fines terapéuticos, que requieren licencias y aprobaciones independientes.
«Actualmente, la Ley de la Industria del Cáñamo de 2008 facilita el cultivo y el suministro de fibra de cáñamo con bajo contenido de THC y la producción de semillas en Nueva Gales del Sur en condiciones controladas, sin comprometer la eficacia de las estrategias antidrogas existentes de la Policía de Nueva Gales del Sur», según Moriarty.